Hoy nos sumergiremos en otra propiedad asombrosa del agua que a menudo se pasa por alto pero tiene efectos extraordinarios en nuestro mundo: la tensión superficial. ¡Así es, nuestro querido H2O tiene una especie de 'piel' invisible!

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La tensión superficial se debe a la cohesión, esa fuerte atracción entre las moléculas de agua que las mantiene juntas. Pero en la superficie del agua, las moléculas tienen vecinos solo por debajo y a los lados, no por encima. Esto las lleva a aferrarse aún más fuertemente a sus vecinos, creando una "película" tensa en la superficie.

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¿Te has preguntado alguna vez cómo algunos insectos, como el zapatero, pueden caminar sobre el agua sin hundirse? Bueno, eso es gracias a la tensión superficial del agua. Este increíble fenómeno permite que objetos más densos que el agua, como estos insectos, se mantengan a flote siempre que la tensión superficial no se rompa.

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Otro ejemplo fascinante de la tensión superficial en acción es la forma en que el agua se acumula en gotas. Si observas de cerca una hoja después de la lluvia, verás pequeñas esferas de agua descansando sobre ella. Esta forma esférica es el resultado de la tensión superficial del agua minimizando su área para conservar energía.

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Pero eso no es todo. La tensión superficial también juega un papel fundamental en nuestra vida cotidiana. Cuando lavas tus manos o tu ropa, la tensión superficial ayuda al agua y al jabón a penetrar en las fibras y limpiarlas. Incluso en el campo de la medicina, la tensión superficial permite que las agujas hipodérmicas penetren la piel con menor resistencia.

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La tensión superficial del agua, aunque no es visible para nosotros, es un testigo constante de la magia de la física en nuestro mundo. Sigue con nosotros para aprender más sobre las maravillosas propiedades del agua.