¿Sabías que el agua cubre alrededor del 71% de la superficie terrestre, pero solo un pequeño porcentaje de esta es apta para beber? ¡Es hora de explorar el increíble mundo del agua potable!

 

El agua potable, también conocida como agua segura, es el preciado líquido que usamos para beber, cocinar y para realizar tareas domésticas y de higiene personal. La OMS y la UNICEF definen que se tiene acceso al agua potable cuando la fuente de la misma se encuentra a menos de 1 kilómetro de distancia del lugar de utilización, y el acceso se considera óptimo cuando se dispone de al menos 100 litros diarios para cada miembro de la familia.

¡Aquí viene un hecho fascinante! El agua potable es vital para nuestra existencia, sin embargo, se estima que alrededor de 2.2 mil millones de personas en todo el mundo aún no tienen acceso a servicios de agua potable seguros. Este es un hecho que pone de relieve la importancia de conservar este recurso vital y hacer esfuerzos para garantizar que todas las personas tengan acceso a agua segura.

 

Pero, ¿qué hace que el agua sea segura para beber? El agua potable debe estar libre de microorganismos, productos químicos y contaminantes físicos que puedan causar enfermedades. Los procesos como la filtración y la desinfección pueden hacer que el agua sea segura para beber.

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¿Listo para otro dato curioso? La cantidad de agua potable que consumimos puede depender en gran medida de donde vivimos. Por ejemplo, en los Estados Unidos, el consumo de agua per cápita es de alrededor de 340 litros al día, mientras que en algunos países de África subsahariana, puede ser de menos de 20 litros al día.

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En conclusión, el agua potable es un recurso indispensable y vital para la vida, y cada gota cuenta. ¡La próxima vez que te refresques con un vaso de agua, recuerda cuánto valor tiene ese líquido transparente y esencial!